Para ser objeto de crédito debe de estar terminada la obra así como de cumplir con los servicios básicos indispensables, cumplir un estado de conservación óptimo y que no rebase los montos establecidos por las autoridades otorgantes de crédito
Debe ser habitable, es decir, debe contar con instalaciones funcionales, estructura en buen estado y contar con servicios básicos, además de tener como mínimo un estado de conservación regular y tener por lo menos 30 años de vida útil remanente.